Entre otras tendencias del sector

El top 5 de destinos urbanos y de playa donde buscan crecer las grandes cadenas

29 de enero de 2024

Las grandes cadenas españolas y extranjeras tienen a España en el radar para sumar presencia, principalmente en destinos consolidados y maduros cuyo ranking ha publicado el Barómetro del Sector Hotelero, elaborado conjuntamente por STR y Cushman & Wakefield.

En lo que tiene que ver con los destinos urbanos, los que lideran la lista y forman parte de este top 5 son: Málaga, que sube un puesto en comparación con 2022 y se coloca en cabeza del ranking, seguida de Madrid, que baja un lugar, Barcelona, Palma (Mallorca) y Sevilla, detalla la consultora. Por su parte, los destinos vacacionales españoles preferidos por las hoteleras para expandir su portfolio están encabezados por Mallorca, Costa del Sol, Ibiza, Tenerife y Gran Canaria, de acuerdo al ranking de Cushman.

La consultora confirma, además, algunas tendencias en el sector hotelero como que han detectado un aumento de procesos de búsqueda de operador, al auge de destinos emergentes, así como un aumento de las gestoras de marca blanca para ganar cuota de mercado con franquicias y ‘management’, especialmente con marcas internacionales, mientras que auguran un 2024 similar al año pasado en inversión con el radar puesto en las carteras.

«Cada vez encontramos más interés en destinos que no son los típicos como la costa de Cádiz, Menorca, Costa Dorada y Costa Blanca (Benidorm). La evolución del sector hotelero la estamos viendo también en los inversores que están buscando en destinos alternativos», ha explicado Bruno Hallé, socio y codirector de Cushman & Wakefield Hospitality en España

Para la consultora, la inversión hotelera en España en 2023, aunque se situó por encima de los 4.000 millones de euros con tres grandes transacciones, «ha adolecido de una falta de oferta». Esto debido, explica, a la buena marcha operativa en el conjunto de la industria hotelera. «Actualmente el sector tiene un bajo nivel de endeudamiento y no encontramos NPL (Non Performing Loans), por lo que las operaciones oportunistas han sido muy escasas. Sí ha sido, en cambio, un buen año para los inversores con ‘equity’ que han podido optar a la compra de hoteles ‘trofeo’ y otros activos con buenas ubicaciones gracias a necesitar menos nivel de financiación».

 



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