Análisis 'Desarrollo'
Golpe a Arabia Saudí en el mayor proyecto hotelero de la historia por guerra en Israel
20 de octubre de 2023El más ambicioso proyecto hotelero de la historia que viene promoviendo Arabia Saudí en torno al Mar Rojo acaba de sufrir un importante golpe a sus expectativas con el estallido de la guerra en Israel tras los ataques terroristas de Hamás desde Gaza.
El interés inversor por la zona afronta con este conflicto una amenaza ya que la zona estructuralmente se ve sometida a grandes tensiones políticas y fronterizas, a causa de compartir suelo en Oriente Medio tres religiones como la musulmana, la judía y la cristiana.
El negocio turístico precisa de la mayor percepción de seguridad, tranquilidad y estabilidad, y el área geopolítica de Oriente Medio es la que desde la Segunda Guerra Mundial mayores contiendas bélicas ha sufrido por su ubicación como eje mundial.
La rivalidad regional entre los sunitas de Arabia Saudí y los chiítas de Irán han convertido a la región en uno de los escenarios de disputas entre las mayores potencias mundiales como son Estados Unidos y Occidente de un lado, contra China y Rusia del otro.
La deseada transición de Arabia Saudí de una economía basada en el petróleo a una en el turismo partía de una pacificación de la zona que venía dándose en los últimos años, con acuerdos en marcha para que países musulmanes como Marruecos fueran reconociendo el estado de Israel.
De hecho, Arabia Saudí contemplaba sumarse estos conocidos como acuerdos Abraham —en referencia al fundador de las tres citadas religiones—, lo que hubiera supuesto un golpe a Irán sus aliados sirios o libaneses ya que su gran rival hubiera visto facilitado su acceso a la tecnología militar más puntera.
Los ataques terroristas de Hamás se considera que recibieron el respaldo de Irán para desbaratar el previsto reconocimiento de Israel por parte de Arabia Saudí, que el día después de los atentados anunció su renuncia a ese acuerdo, después de unos meses en los que venía llegando a sus primeros acercamientos con los persas.
Pero la percepción de pacificación y estabilidad que venía extendiéndose en los últimos años ha sufrido un golpe irreversible en su reputación con la escalada bélica, desatando la incertidumbre sobre la zona para el futuro en la que se incluye su vecina Yemen, y afectando por ello a los proyectos en la región, especialmente los relacionados con los viajes de placer.
Arabia Saudí, en principio, según Gloria Guevara, asesora especial de Turismo de Arabia Saudí y ex presidenta del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), se había fijado el objetivo de 100 millones de turistas en 2030, incluyendo locales e internacionales, que serían unos 55 millones.
“Hay que recordar que 2023 aquí no había turismo doméstico, así quese ha fijado una nueva de 120 millones. De enero a julio hemos alcanzado los 60 millones de viajes. En 2022 tuvimos en total 16,7 millones de visitas internacionales y en julio de 2023 ya hemos alcanzado esa cifra, de los cuáles menos de 8 millones fueron peregrinos. El objetivo es estar entre los cinco países más visitados en ese 2030”, dijo la ex secretaria de turismo mexicana a La Razón.
Sobre si veía viable un desembarco de las grandes hoteleras españolas en el Mar Rojo, como ya hicieron en la Riviera Maya y Dominicana, consideraba que “sí, se puede hacer algo parecido”.
Además de iniciativas como la de Neom, el faraónico The Line o la de Diriyah, destacaba “un proyecto en el Mar Rojo de 91 islas. Ya se están abriendo los hoteles en islas de bajo impacto con instalaciones espectaculares, protegiendo el arrecife de coral del Mar Rojo, que es muy virgen. También está el proyecto de Quiddiya, a 45 kilómetros de Riad, una ciudad de entretenimiento del tamaño de París, con un circuito de F-1 y atracciones”.
En un reciente foro, Guevara explicaba también que Arabia Saudí “va a ser una de las cinco potencias en el mundo más visitadas. Su extensión territorial es parecida al tamaño de México. Estamos desarrollando polos turísticos que nos van a ayudar a traer más turistas de países como Colombia y de Latinoamérica en general”.
El reino saudí despliega asimismo un ambicioso plan de construcción de ciudades y aeropuertos para apoyar a las 600 mil nuevas habitaciones de hotel que proyecta entre muchas otras acciones.
De ellas destaca la citada Neom, un megaciudad de 500 mil millones de dólares y 33 veces más grande que Nueva York, cuya primera fase abrirá en 2024 con Sindalah y que suma otros proyectos como The Line, Trojena y Oxagon.
Su objetivo es el convertir a la región en el lugar más futurista del mundo, repleto de ciudades hiperconectadas, puertos, zonas empresariales, centros de investigación, instalaciones deportivas y destinos turísticos de primer nivel, aunque ahora estos proyectos megalómanos han visto cuestionadas su viabilidad y expectativas.